Después de que Zona Cero denunció la existencia de un tuitero ‘coge puntas’ en Barranquilla que, de manera morbosa, grababa a las mujeres en faldas y publicaba las fotos y videos en la red social, la Policía, a través de la Sijín y la Sipol, conformaron una comisión especial para dar con el paradero de esta persona.

Con la denuncia, el responsable de estas tomas irrespetuosas hacia las mujeres, cerró su cuenta de Twitter @mrcurioso69, que ya se acercaba a los 60 mil seguidores, impulsada por el morbo de otros usuarios que veían y compartían las imágenes que a través de esa cuenta se difundían.

Pese a que la cuenta fue suspendida por el usuario, la Sijín y la Sipol ya pidieron a los centros comerciales de la ciudad los registros de todas sus cámaras de seguridad, según la fecha de los videos y fotos, que Zona Cero se tomó el trabajo de capturar antes de que el ‘coge puntas’ borrara su cuenta en la red social.

Este medio también conoció que varias de las víctimas de @mrcurioso69 hicieron las respectivas denuncias por injuria por vía de hecho, lo que le permite a las autoridades adelantar su trabajo investigativo.

El usuario @mrcurioso69 no solo exponía a las mujeres en su red social, sino que las perseguía por varias cuadras de una manera obsesiva, grabándoles videos y haciéndoles comentarios morbosos.

Zona Cero conoció que las autoridades tienen indicios de que el morboso involucró a un menor de edad en la grabación de sus videos en una de las escaleras eléctricas de un centro comercial de la ciudad.

El ‘coge puntas’, como se le conoce al responsable de grabar y difundir estos videos, se dedicó a esta práctica durante al menos 2 años sin ser denunciado por nadie, puesto que las mujeres nunca se percataron de haber sido grabadas.

Después de reconocerse en las fotos publicadas por @mrcurioso69, una de las denunciantes le dijo a Zona Cero que nunca se percató del momento en que el desconocido se le acercó para grabarla a escondidas, aunque confía en que las autoridades, con su riguroso trabajo, podrá desenmascarar a la persona que se escondía detrás de esa cuenta de Twitter.